A pesar de las advertencias sobre los peligros del sol, el bronceado sigue siendo una moda popular. Muchas personas creen que tener un bronceado les hace lucir más saludables y atractivos. Sin embargo, la realidad es muy diferente, y es que, como ya deberíamos saber, exponerse al sol sin protección puede tener graves consecuencias para la salud, incluyendo quemaduras solares, envejecimiento prematuro de la piel e incluso cáncer de piel. Entonces, ¿existe el bronceado sano?

A día de hoy, el bronceado sigue siendo una forma que tiene nuestro cuerpo de defenderse del sol. Cuando la piel se expone a éste, produce melanina, un pigmento que le da a nuestra piel un color más oscuro y que ayuda a protegerla de los dañinos rayos UV. Sin embargo, este proceso puede ser peligroso si se expone al sol por periodos prolongados sin protección adecuada.

Afortunadamente, no es necesaria ninguna exposición para conseguir el color que deseamos, hay alternativas para obtener un bronceado sin exponerse. En lugar de tomar riesgos con tu salud, puedes probar alguno de los métodos que explicamos a continuación.

Alternativas para un bronceado saludable

1. Bronceado con aerógrafo: es una forma segura y efectiva. Este método implica la aplicación de una solución de bronceado en spray en la piel con un aerógrafo, lo que da como resultado un bronceado uniforme y natural.

2. Bronceado con DHA: la DHA es un ingrediente que se encuentra comúnmente en los productos de bronceado sin sol. Cuando se aplica en la piel, reacciona con las células muertas de ésta para producir el color. Es un método seguro y fácil de aplicar, pero asegúrate de seguir las instrucciones del producto y exfoliar la piel antes de aplicarlo para obtener mejores resultados.

3. Maquillaje bronceador: es un método temporal. Estos productos se aplican directamente sobre la piel para dar un aspecto bronceado instantáneo. Si eliges este método, asegúrate de elegir un producto que sea seguro para la piel y que no cause reacciones alérgicas.

Recuerda, siempre es importante proteger tu piel del sol para evitar daños a largo plazo.